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Dentro de Mireia Tlotzin:

   Hola! Nací y crecí en Barcelona. Con 16 años no quise seguir estudiando, así que desmotivada sin saber que hacer, me puse a estudiar estética, que era a lo que se dedicaba mi madre. A los 25 años ya tengo un negocio, mi piso (con hipoteca claro) y una vida perfecta, pero no me siento feliz.   

   A los 28 años, tengo una crisis existencial y decido dejarlo todo e irme con la mochila a viajar por sudamérica. Ahí comienza el Viaje de mi Vida. Una experiencia que me cambió la vida. . Tener el tiempo de dedicarme a mi y a vivir hizo que despertara una voz interior que jamás había escuchado. Conocer a Dios, Universo, Gran Espíritu o como quieras llamarle fue el mayor regalo de mi vida.    

   A partir de ese momento el viaje pasó a ser un viaje hacia una misma: Conocí el gran poder de la oración, estuve con chamanes en la selva, en comunidades limpiando y sanando. Descubriendo el gran poder que habita en nosotras. Fue un bonito despertar. Me llené de sabiduría recorriendo casi todo el continente.    

   Después de dos años y medio volví a Barcelona. Entonces me tocó volver al pasado pero siendo otra mujer totalmente distinta. Volví a mi piso y al centro de estética. Empecé a darme cuenta que eso ya no era lo que me gustaba y que debía cambiarlo. Salir de tu estado de confort, pero esta vez no era un viaje, si no que era mi vida. Era una transformación diaria, una batalla mental con las creencias familiares y patriarcales. Pero siempre escuchando mi corazón, canalizando constantemente frases para mi crecimiento personal, orando, meditando, tocando el tambor, medicinas chamánicas y realizando círculos de luna llena.   

   Apareció Pedro, mi compañero y padre de mis hij@s. Tan iguales los dos, con los mismos anhelos y los mismos sueños.   Después de hacer la búsqueda de visión decidí cerrar y no seguir con la estética. También nos mudarnos a una casa en la montaña. Decidimos abrir una tienda de alimentación ecológica, seguido fue el covid y nuestra ruina. Después de tocar fondo, con dos niños pequeños tuve que vender mi piso hipotecado para poder pagar las deudas.

   Ahí fue donde nos dimos cuenta que no queríamos formar parte de un sistema que no te deja ser feliz, trabajas para sobrevivir y eres dependiente de los bancos para poder tener un hogar o un negocio. Paralelamente era todo un reto de crecimiento personal. Entender que la vida nos estaba poniendo en situaciones límite para realmente despojarnos de todos los apegos materiales y sistémicos. Cuanto más nos liberábamos de la vida  material, más conectados con nuestra alma. Más claramente escuchaba mi voz interior, más canalizaba. Mi propio Yo Superior se encargaba de hacerme terapia todos los días con frases que iba trabajando en mi y procesos donde iba entendiendo el para qué de las cosas que nos pasaban. Sin darme cuenta ya estaba creando Mensajes del Alma, con mi propia experiencia.   

   Después de unos cuantos años de aprendizaje, de vida, hoy tenemos 3 hijos y vivimos en una caravana. Viajando por  España, disfrutando de la libertad y confiando en que Dios nos provee en el presente. Apostando también el vivir dedicándonos a lo que nos gusta y nos llena gusta, sentimos  y nos motiva. Ahora estamos en la búsqueda de un lugar en la Naturaleza donde poder enraizarnos y crear nuestro hogar pero mientras tanto aprendemos a respirar la vida.